Los grupos estuvieron divididos en tres categorías: niños, discapacidad y adultos mayores. A su vez, los chicos fueron separados por sus edades. Ellos asistieron a distintos sectores de Malargüe habilitados para contener a cada grupo.
En el mes de Enero había comenzado la Colonia de Verano y en sus inicios se dijo que era “seca”, porque no estaban habilitadas las piletas del departamento para poder llevar a cabo las actividades en esos espacios. A raíz de la poca demanda, el Intendente Juan Manuel Ojeda y la Secretaria General, Constanza Segura trabajaron en los permisos adecuados para que la Escuela de Verano pudiera asistir a las mismas.
“Habilitaron las piletas y de 120 inscriptos pasamos a tener unas 300 personas en general”, afirmó Alberto “Poli” Enríquez, director de Proyección Deportiva. Seguidamente compartió su felicidad por este logro y reconoció que hay niños de Malargüe que solo pueden llegar a una pileta por intermedio de la Colonia de Verano.
Por otro lado, puso énfasis en la cantidad de lugares que abrieron para el desarrollo de las actividades e indicó que fue muy acertada la decisión de permitir grupos de niños en las sedes barriales, en distintas escuelas del medio como así también en la zona rural, puntualmente en Agua Escondida.
De esta forma la Municipalidad de Malargüe, por intermedio de la Dirección de Proyección Deportiva, le brindó a los más pequeños y a los adultos mayores la posibilidad de recrear, sociabilizar, compartir y disfrutar la Colonia de Verano luego de un año difícil en donde la pandemia reinó cada día, impidiendo a las personas hacer sus rutinas.